Maestro, ¿cómo puedo enfrentar el aislamiento?
-Maestro, ¿cómo puedo enfrentar el aislamiento? -Limpia tu casa. A fondo. En todos los rincones. Incluso los que nunca tuviste ganas, el coraje y la paciencia de tocar. Haz que tu casa sea brillante y cuidada. Quita el polvo, las telarañas, las impurezas. Incluso las más ocultas. Tu casa te representa a ti mismo: si cuidas de ella, también te cuidas. -Maestro pero el tiempo es largo. Después de cuidar de mí a través de mi casa ¿cómo puedo vivir el aislamiento? -Arregla lo que se puede arreglar y elimina lo que ya no necesitas. Dedícate al remiendo, borda los arranques de tus pantalones, cose bien los bordes deshilachados de tus vestidos, restaura un mueble, repara todo lo que vale la pena reparar. El resto, tíralo. Con gratitud. Y con conciencia de que su ciclo ha terminado. Arreglar y eliminar fuera de ti permite arreglar o eliminar lo que hay dentro de ti. -Maestro ¿y luego qué? Qué puedo hacer todo el tiempo solo? ...